Los animales de este libro se divierten cantando y jugando en el bosque. Pueden hacerlo, mientras el lobo no esté. Y es el mismo lobo quien se encarga de decir que por el momento está ocupado: poniéndose el chaleco, los pantalones, los calcetines... El famoso juego tradicional, llega a manos de los pequeños lectores, ilustrado por los dulces y luminosos animales de Bernardita Ojeda.
Los animales de este libro se divierten cantando y jugando en el bosque. Pueden hacerlo, mientras el lobo no esté. Y es el mismo lobo quien se encarga de decir que por el momento está ocupado: poniéndose el chaleco, los pantalones, los calcetines... El famoso juego tradicional, llega a manos de los pequeños lectores, ilustrado por los dulces y luminosos animales de Bernardita Ojeda.